Pensaba que no había mayor nobleza que la de un animal, pero tras esta sesión de fotos confirme que la nobleza pura se da cuando un niño está con su caballo. Hugo mirando a ese caballo, cogiendo sus riendas, pasándolo... Me enseño que somos de la naturaleza que cuidándonos mutuamente somos felices y no necesitamos más. Ademas de lo guapísimo que es este jinete me gustaría destacar su naturalidad y la de su familia que vivió cada segundo de la sesión de fotos con mucha ilusión y cariño. Esa ilusión conservada hasta la recogida de el álbum en la que el papa Raúl quería llevarlo a casa para que cuando llegasen de las vacaciones lo encontraran y se sorprendieran, eso es luchar por hacer feliz a tu familia, cuidando pequeños detalles. Gracias familia por confiar en mí y regalarme estos pequeños momentos con vosotros.
Sesion de fotos de comunion, hugo y su caballo en Granada.
Actualizado: 27 jun
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